Conservación de los ovoproductos
Deben respetarse siempre las indicaciones de conservación y la fecha de caducidad indicados en el envase. No obstante, existen algunas normas generales en función del tipo de ovoproducto:
- Los ovoproductos desecados (en polvo) por lo general pueden mantenerse a temperatura ambiente, en un lugar fresco, seco y oscuro, alejados de temperaturas extremas y de olores fuertes. Una vez abierto el envase, debe evitarse la contaminación y la absorción de humedad. Los huevos reconstituidos (tras la adición del agua al huevo en polvo) se deben usar inmediatamente
- Los ovoproductos líquidos pasterizados refrigerados se deben conservar a las temperaturas recomendadas por el fabricante mientras el envase permanezca cerrado. Una vez abierto el envase deben usarse inmediatamente y nunca dejarlos a temperatura ambiente.
- Los ovoproductos ultracongelados pueden conservarse durante años si se mantienen a una temperatura inferior a los -18ºC. y tienen una larga duración si se mantienen a menos de -12°C. Deben descongelarse en refrigeración o bajo agua corriente fría en el envase sin abrir.
La clara en polvo dura tanto tiempo como se mantenga seca a temperatura ambiente.
El huevo entero en polvo y la yema en polvo es recomendable conservarlos en frío, a menos de 10°C, para mantener la calidad.
- El huevo entero en polvo normal no estabilizado tiene una vida comercial de aproximadamente un mes a temperatura ambiente y cerca de un año en refrigeración.
- El huevo entero estabilizado (sin glucosa), puede durar hasta un año a temperatura ambiente.
- La yema del huevo en polvo no estabilizada se conserva entre tres meses a temperatura ambiente y más de un año en refrigeración.
- La yema del huevo en polvo estabilizada (sin glucosa) tiene una vida comercial cercana a los ocho meses a temperatura ambiente y de más de un año en refrigeración.